El artículo 39 de la Ley de fomento a la industria del cine en la República Dominicana constituye un gran incentivo para los cineastas y empresas extranjeras que desean filmar sus películas en el país.
Según las estimaciones de Juan Aguerrevere, CEO de Lantica Media, empresa que ofrece servicios a las industrias de medios, televisión y cine que incluye al estudio Pinewood, este año podrían ingresar al país 39 millones de dólares (dos mil millones de pesos) por concepto de rodaje de diversas producciones extranjeras. El monto sería aportado por la filmación de películas y series de la NBC, Turner, Entertainment Studios Televisión, Seesaw Film (discurso del Rey) y Netflix que comenzará a rodar el próximo mes.
Al comentar lo que acontece con la legislación y cómo se ha beneficiado el país en ese sentido, Aguerrevere analizó los beneficios de la legislación.
“Para hablar de cine internacional tenemos que dar un marco de cómo está el cine. Hoy en el mercado de taquilla lo que la gente gasta a nivel global en taquillas son 37 billones de dólares. La entrada de nuevos jugadores como Netflix, Amazon Prime cambiaron el negocio y se espera que para el año 2022 ver las películas bajo demanda alcance a esos 37 billones de dólares. Por lo que todavía la taquilla del cine sigue siendo muy importante a pesar de que se escuche a mucha gente hablando de esas plataformas”, puntualizó.
El experto en negocios de la industria cinematográfica y televisiva aclaró sin embargo que en el negocio del cine 8 de 10 película dejan pérdidas, aunque es muy rentable para los que logran grandes recaudaciones con una buena película. “Las películas que tienen presupuestos de más de 100 millones de dólares, eso es muy particular. Pero el resto de la industria, que son unas 4 mil películas al años que se hacen, 8 de cada 10 dan pérdidas”.
Aguerrevere hizo la puntualización para detallar la razón que motiva a un productor a seleccionar un destino fílmico para rodar una película. “Esto está vinculado a las locaciones que se ofrecen, al guion, que es lo que define a dónde va, porque es vital. Esto es lo que vale oro. Luego están los incentivos financieros”, refirió.
El esquema de negocios que mueve a la industria mundial se gestiona con una distribución económica de riesgo entre los productores. “Una película se financia aproximadamente de la siguiente manera. 60% lo pagan los distribuidores (los que van explotar la película en cada país, que dan un dinero por adelantado) después un 20% (más o menos) que puede aportar un capital y después vienen los estados con sus leyes que ponen el adicional”.
Netflix en RD
De los 39 millones de dólares que llegarían al país este año, 15 son del acuerdo logrado con la productora de contenido streaming Netflix por el rodaje de una serie de 10 capítulos. Es el resultado de una ardua labor de todo el equipo de trabajo de Lantica Media.
“Es un trabajo más o menos de dos años porque interviene mucha gente en todo el proceso, desde la locación, creatividad, financiero. Tenemos en el estudio a un equipo de personas que le dan seguimiento a 80 películas que están en distintas etapas en al producción, una labor sistemática que labora de manera coordinada. A esto se le suma el trabajo de mercadeo que se hace de manera continua”, detalló.
Rol del Estado
“Un Estado debe incentivar la industria del cine por dos razones. No hay forma de que den ganancia las películas si no existe un apoyo gubernamental. Y una película en muy corto período de tiempo es una inyección de divisas y generación de empleos al destino que vaya, por lo que cada uno de los destinos cinematográficos pelea para que esas películas vayan a esos destinos”.
Al entrar en los detalles del 25% de incentivo a los productores extranjeros consignado en el artículo 39 de la Ley al fomento del cine acotó. “Ese monto se paga con unos créditos fiscales transferibles, para las empresas que cierren su año fiscal en diciembre, tienen una oportunidad de comprar estos créditos fiscales para lograr un ahorro en su pago del Impuesto sobre la Renta. Ese monto se negocia con un descuento, sin embargo es preciso acotar que el productor solo viene recibiendo 20%”.
Al repasar la competencia que tiene el país con otras naciones que disponen de mayores beneficios para las producciones internacionales, el CEO de Lantica Media puso como ejemplo el porcentaje que dan las autoridades de Fiji en el Pacífico Sur que es de 47%, Puerto Rico que tiene un 40% en efectivo, o el 30% de Colombia, entre otros no es tan atractivo.
“Para que se tenga una idea lo vital que son los incentivos, en Hawai recibió en 2017 260 millones de dólares en producciones, con un impacto su economía de 390 millones según su análisis. En el caso de la isla Fiji recibió 125 millones el pasado año, teniendo un impacto de 350 millones, Puerto Rico hubo una inversión de 146 millones y el impacto de 225 millones. Por lo que se puede notar, el nuestro no es tan atractivo internacionalmente, sin embargo vienen por las locaciones y la infraestructura. Nosotros por ejemplo contamos con Pinewood, unos estudios del primer mundo. En ese sentido te puedo decir de las empresas que cuentan con equipos de primer mundo, equipos, profesionales y otros servicios que se pueden comparar con los de otros países”, indicó.
Otros de los beneficios que ha aportado la legislación es la oportunidad que han tenido muchos técnicos de certificarse gracias al artículo 34 de la misma Ley. “Se ha entrado a un grupo de dominicanos y ahora tenemos para atender al mercado internacional”.
Retos
Si bien tienen el acompañamiento de las autoridades fiscales para el cumplimiento de lo establecido en la Ley de cine, consideró que aún hay escollos que deberán resolver en lo concerniente al plazo para la validación de los certificados fiscales.
“La ley dice 90 días para el procesamiento, pero nosotros estamos fuera de esos tiempos. Hay un trabajo titánico de la gente de Dirección General de Cine para entrar en la Ley. Es la combinación la que empieza a poner en caldo de cultivo para que una película venga a la República Dominicana”.
Una de las tareas que deben mejorar es el plazo para el cierre de los períodos fiscales. “La presentación de impuestos sobre la renta impone que los certificados del artículo 34 salgan en una fecha muy particular. Y el sistema regulatorio de la DGII y DGCINE colapsan dos meses antes del pago de los impuestos y abandonan al cliente, pero ya hay una conciencia para dividir a los internacionales y a los locales”, indicó.
Definió como crucial la etapa por la que atraviesa el país y estimó que partiendo de la experiencia de los productores extranjeros en lo que tiene que ver con todo el proceso, continuará conquistando mercados internacionales.
“Si DGCINE, Dirección General de Impuestos Internos procesan los expedientes a su debido tiempo y el mercado de los certificados lo recoge en el tiempo adecuado nosotros como país vamos a poder competir internacionalmente, porque es un conjunto de situaciones”, indicó.
Perspectiva
La capacitación, locaciones, infraestructura y por supuesto el incentivo fiscal están colocando al país en el mapa como destino para los productores de cine y de televisión extranjeros.
“La cercanía, locaciones y infraestructura han sido determinantes. Sin embargo si algo nos falta en República Dominicana es vuelo directo a Los Ángeles, si el Estado anima a los empresarios a poner un vuelo directo hacía allí, eso le daría un mayor impulso por el tiempo que representa para los productores y directores porque cuando tienen su descanso retornan a sus casas, pero el tiempo es trastorno con las escalas”.
Recordó que Lantica Media través de el centro de enseñanza Entrenamiento Cinematográficos del Caribe, que dirige Elías Muñoz ha contribuido a la capacitación, para lo cual han destinado aproximadamente 2.4 millones de dólares. “Se hace una encuesta con los productores y directores y a partir de ahí se preparan los entrenamientos para certificar a los técnicos”.
El pasado año, el 70% del negocio de Lantica Media fue con producciones nacionales y el restante 30% fueron extranjeras. Gracias al Consejo Intersectorial para la Promoción de la Actividad Cinematográfica en la República Dominicana (CIPAC), órgano regulador de la industria, a la Dirección General de Cine y a la Dirección General de Impuestos Internos, la perspectiva de la firma son muy positivas, debido a las mejoras que se han hecho para el trabajo.
“Este año tendremos el 70% de la inversión vendrá del extranjero. El estudio a toda capacidad debe traer en divisas unos 120 millones de dólares anuales, eso si estamos operando a capacidad”.
Mejoras en la Ley
Juan Aguerrevere consideró que el articulo 39 es una herramienta que tiene el Estado para atraer inversiones extranjeras. “La actitud que deberíamos tener es como hacerla más competitiva. El artículo 34 por ejemplo es para fomentar a la industria local, ahí cambia porque no es para atraer efectivo, sino para desarrollar una actividad económica y convierte al país en el único en el mundo que le otorga el 100% del costo de la película en incentivo y eso genera malas practicas, lo que afecta al que hace un uso correcto de la ley”, contó.
Aguerrevere definió como un gran aliado a la Dirección General de Impuestos Internos, institución con la que trabajo de la mano en los procesos de producción.
Unos que otros teóricos y profanos de la ley de fomento al cine han planteado que esta sea modificada, mientras que algunos sostienen que debe desaparecer porque hay cineastas que tenido manejos no adecuados.“Tu tienes un trabajo como el de José María Cabral, una película maravillosa, impecable que hace magia con el dinero que le dan, pero hay otras películas que tú te preguntas así se está utilizando el dinero de los contribuyentes para esto. Ahí viene una polémica y la encrucijada como regulador. Quienes plantean eliminar la ley o el artículo 34 es que no se ha detenido a sacar la cuenta de los beneficios que tiene o el artículo 39. El impacto económico que genera el 34 es superior a las malas prácticas, lo que hay es que fortalecer las normas”, comentó.
Con el cine local
Lantica Media seguirá apostando al desarrollo de la industria de cine dominicana, sin embargo son cautos al momento de hacer sus negocios. No trabajan el cine local pensando solamente en tener una buena taquilla.
“Nos interesan las películas que tienen un valor de producción porque utilizamos el artículo 34 para hacer películas que le demuestren al mundo lo que son capaces los dominicanos. Nuestro apoyo al cine dominicana va en esa dirección, es un tema de talento”, puntualizó.